Desde mis inicios como docente en la Facultad de Farmacia, Costa Rica, gente emprendedora de la misma academia nos instaba a que además de la experiencia universitaria, se vuelve una necesidad imperiosa el que vayamos acumulando experiencias laborales.
Sentir la presión de un sistema, de un jefe más o menos educado, de una institución de trascendencia histórica en el país (como la Caja Costarricense del Seguro Social)... son experiencias que solo un trabajo fuera de la academia puede ofrecer de manera exhaustiva.
Por eso me vine para el Hospital de Sn Ramón, Alajuela, C.R., para ganar parte de esa experiencia laboral que con tanto ahínco y creatividad, trataré de transmitir a los estudiantes.
No crean, sigo con el tema de la creatividad y la innovación, y esta nueva experiencia laboral es parte de ello.